miércoles, 8 de diciembre de 2010

EL MISTERIO NEARDENTHAL

"Lo más bello que podemos experimentar es el lado misterioso de la vida. Es el sentimiento profundo que se encuentra en la cuna del arte y de la ciencia verdadera."
(Einstein)

INTRODUCCIÓN

Ya vimos en el contexto de las entradas anteriores recientes, que el "hombre de las cavernas" no habría sido el producto final de una hipotética y aún no demostrada "escala evolutiva", sino la consecuencia lógica de una catástrofe global, el Diluvio, que eliminó de golpe las condiciones de hábitat original de una antigua civilización tecnológica de influencia planetaria, obligando a los escasos supervivientes a buscar refugios naturales para guarecerse de las, para entonces, adversas condiciones climáticas.

En este marco descriptivo alternativo de la Prehistoria cabe hablar de uno de los grandes misterios de la antropología, el Hombre de Neardenthal, así como de las posibles causas de su repentina aparición en un ecosistema donde, según la Ciencia Oficial, habitaba el antecesor del hombre actual... y de las implicancias que su supuesta extinción podría tener para nosotros hoy.

El hombre moderno (homo sapiens) tiene, según los antropólogos, dos variantes principales: El Hombre de Neanderthal (homo sapiens neanderthalensis) y el homo sapiens sapiens, del que desciende el hombre actual, destacando entre este último el Cro-Magnon de Europa occidental.

En la época de la Gran Glaciación estas dos variantes de seres humanos poblaron, en forma contemporánea, parte del hemisferio norte, principalmente Europa.

HOMO SAPIENS NEANDERTHALENSIS

La existencia del Hombre de Neanderthal se descubrió en una cueva del Valle Neander, cercana a Düsseldorf, Alemania, en el año 1856. Fuerte y muy musculoso, habitaba en cuevas y cobijos exteriores para guarecerse del frío y del duro ambiente. Vivió en el periodo glaciar de Würm en Europa y el oeste de Asia contemporáneamente con el Hombre de Cro-Magnon. Su forma de vida pudo haber sido muy similar a la de éste, aunque mucho más primitiva. Cuidaba a sus enfermos y enterraba a sus muertos y es posible que utilizara algún tipo de lenguaje con efectividad. Era muy grande, tenía la frente estrecha y caída hacia atrás, un arco ciliar prominente, los pómulos sobresalientes y una mandíbula protuberante. Sin perjuicio de sus características físicas, si apareciera vestido en la actualidad pasaría prácticamente desapercibido hasta que quedara en evidencia su escaso intelecto... aunque su capacidad craneana, al igual que la del Cro-Magnon, superaba los 1.600 cm³. Se extinguió gradualmente a medida que los humanos modernos ocuparon Asia y Europa. (Fuentes: Gran Historia Universal Larousse, y Enciclopedia Visual La Tercera, Historia Ilustrada del Mundo).

PERO... ¿SE EXTINGUIÓ REALMENTE?

A pesar que la ciencia actual postula su total extinción en aquella lejana época, al parecer algo escapó a sus razonamientos y exhaustivas investigaciones antropológicas, puesto que hay muchísimas evidencias que nos podrían llevar a concluir que el llamado Hombre de Neanderthal... ¡existe en nuestro tiempo!

Considerando el alto nivel tecnológico alcanzado por la civilización antediluviana, como hemos analizado en las entradas anteriores, adelanto aquí una teoría que, en el contexto de todo lo expuesto en mi libro “Fenómalos La Quinta Esencia”, podría explicar consistentemente su enigmática existencia paralela:

Ambas razas eran seres humanos, pero no producto de procesos evolutivos distintos e independientes como postula la ciencia actual (ya que aparte de la notoria diferencia en sus intelectos y en su contextura física, en todo lo demás coincidían: sistemas óseos, musculares, nerviosos, endocrinos, circulatorios, respiratorios, digestivos, urinarios y reproductivos, así como la disposición de sus miembros: cabeza, ojos, boca, nariz, oído, brazos, manos y pies con cinco dedos, etc.), sino producto de manipulaciones genéticas que establecieron la diferencia.

En efecto, la civilización antediluviana -como lo evidencian los textos protoiraníes y también las controvertidas  Piedras de Ica en Perú- habría llegado a grandes avances en medicina e ingeniería genética, conocimientos con los que -entre otras aberraciones cometidas, como la posible regeneración de algunas especies extinguidas de la era de los grandes saurios para utilizarlos probablemente en las guerras- pudo haber desarrollado una raza de hombres con características simiescas, de gran fortaleza física y limitado intelecto, para utilizarlos en la milicia y en las faenas pesadas en zonas de climas extremos a manera de obreros o esclavos: aquellos que hoy conocemos como Neanderthal.

Parte de éstos habrían sobrevivido al Diluvio y a la Glaciación que le siguió, logrando adaptarse en las devastadas regiones heladas gracias a su excepcional resistencia física, pero no pudieron con la llegada de los sobrevivientes Cro-Magnon que, obviamente más inteligentes y mejor equipados, lograron imponerse sobre aquéllos provocando con el tiempo su desaparición.

Los Cro-Magnon no se habrían mezclado con ellos debido a que, como sobrevivientes de la antigua civilización, sabían se trataba de seres humanos “retrasados mentalmente” por alteración genética y por lo tanto una amenaza para su descendencia. Había que desplazarlos, o exterminarlos, por esa razón y porque debido a su gran capacidad física les disputaban ventajosamente los territorios de caza y asentamiento.

Ante tal encarnizada persecución el Neanderthal, aprovechando esa extraordinaria fortaleza física y su resistencia a los climas extremos, se habría refugiado en lugares inaccesibles para el Cro-magnon: los macizos montañosos más escarpados del planeta… en donde permanecerían, ocultos, sus descendientes hasta el día de hoy.

LAS EVIDENCIAS

En los faldeos de los montes Cáucasos, en las laderas de las montañas del Pamir y del Himalaya, en Mongolia, en Siberia y en las casi inaccesibles regiones montañosas y boscosas del noroeste de Norteamérica (Columbia Británica, Vancouver, Alberta, y Calgary en Canadá, Estado de Washington y Montañas Rocosas en los EE.UU., principalmente), se han recogido numerosas narraciones -antiguas y contemporáneas- de avistamientos y encuentros, así como fotografías y algunas filmaciones, acerca de extraños especímenes homínidos, muy escurridizos, que las habitarían.

Se trataría de seres con características que encajan perfectamente con las del Hombre de Neanderthal: comportamiento humanoide primitivo, elevada estatura y gran fortaleza física, cuerpo velludo, adaptado al frío y a la altura, inteligencia entre la del hombre y la del simio, etc., y que rehuyen absolutamente el contacto con los “humanos” permaneciendo ocultos en macizos montañosos inaccesibles, seguramente todavía conscientes del gran peligro que éstos últimos representan para su supervivencia.

Se les conoce por diversos nombres según sea la región donde han sido avistados: Yeti (de Yeh = animal desconocido, Teh = región rocosa) y Metch Kangmi (el abominable hombre de las nieves) en los Himalayas de Nepal y el Tibet respectivamente, Almasty (alma) en el Cáucaso, Chuchuna en Siberia, y Sasquatch (también bigfoot = pie grande) en Norteamérica. Otros nombres por los cuales es conocido también son: Jangali Mosh ('hombre del bosque, hombre salvaje'), Barmanu, Abnuaaya, Bekk-Bok, Biabin-Guli, Gul-Biavan, Guli-Avan, Golub-Yavan, Kaptar, Kra-Dhan, Ksy Gyik, Migou, Mirygdy, Mulen, Voita, y Yowie (este último en Australia).

Al respecto, algunos testimonios a considerar:

1) En el Himalaya: A fines del siglo XIX, el coronel Waddell del ejército anglo-indio, y el explorador británico Sir Douglas Freshfield, declararon haber visto huellas dejadas en la nieve por pies de tamaño gigantesco, tanto en Sikkim como en el Kanchenjunga. En 1921 el famoso alpinista y explorador inglés, coronel Howard Bury descubrió también huellas de unos pies gigantes en la nieve a más de 7.000 metros de altura. A miles de kilómetros de allí y 21 años después, el oficial polaco Slavomir Rawitsch, descubrió en su viaje a la India desde el desierto del Gobi a una pareja de extraños seres "extraordinariamente grandes y que andaban erguidos".

El explorador y alpinista inglés Eric Shipton, fue el primero que logró una prueba de la existencia del "abominable hombre de las nieves", cuando en 1935 obtuvo una fotografía de una inmensa pisada de 31 centímetros de longitud y 18 de ancho, que algún ser dejó impresa en el glaciar Melungtse, entre Tíbet y Nepal. Tiempo después, alpinistas y exploradores famosos como el geólogo francés Bordet o Sir John Hunt, jefe de la expedición inglesa que en 1953 logró subir por primera vez al Everest, afirmaron haber visto al "hombre de las nieves".

Un sabio austriaco, el doctor Tichy, asegura haber visto al yeti en el año 1925 cuando instalaba su campamento y lo describió como un bípedo de piel negra y apariencia vagamente humana. Eric Shipton en 1951, experto en el Himalaya, logró fotografías de huellas a 4.800 m de altura. Edmund Hillary, nombrado caballero por su conquista del Everest en 1953, ocasión en que junto con el expedicionario inglés Robert Hunt divisara huellas del yeti, organizó una nueva expedición al Himalaya con el único y exclusivo propósito de capturar un ejemplar (no lo logró). El montañista Don Whillans quien en junio de 1970 se encontró con un yeti en el Anapurna, un valle del Himalaya rodeado de montañas y logró fotografiarlo a la distancia.

2) En el Cáucaso: La doctora franco-soviética Marie-Jeanne Koffman, (en esa época cirujano en Moscú y miembro de la Academia de Ciencias de la URSS) quien, producto de la recopilación e investigación de una importante bibliografía, organizó y dirigió entre los años 1965 y 1967 catorce expediciones en las regiones del Cáucaso en busca del almasty, las que pese a no haber logrado ninguna prueba concreta de su existencia consiguieron reunir más de trescientos testimonios y declaraciones de los habitantes de la región, de todas las edades y clases sociales, acerca de él. Todos estos relatos corresponden según la doctora Koffman a la descripción de un prehomínido que estaría situado a medio camino entre el Pitecántropo y el Hombre de Neanderthal.

3) En Siberia: El chuchuna o tungu es descrito como un ser de apariencia humana, con pronunciado prognatismo y frente baja, ágil y fuerte, que se desplaza muy rápidamente a saltos. Adaptado a las condiciones extremadamente rudas del invierno siberiano, vive en la actualidad en los bosques impenetrables de Siberia. La revista "Estudios Soviéticos" cita el testimonio de un cazador de la taiga de Obi (Siberia occidental) que los vio en cuatro ocasiones: dos veces hace más de treinta años y otras dos hace unos quince. El testigo relata: "Yo he visto salir a dos de ellos de la selva. Estaban desnudos y el cuerpo lo tenían cubierto de pelo corto. Se balanceaban de una extraña forma sobre sus brazos, más largos que los de un hombre". La Academia de Ciencias Soviética ha catalogado desde 1958 innumerables testimonios, documentos y cartas acerca de la existencia del chuchuna provenientes de regiones inmensas, separadas por millares de kilómetros y obstáculos naturales. (Fuente: El País de España, publicado por BESTIARIO "de lo cotidiano y extraordinario" en abril 2008).

4) En Norteamérica: Se cuenta entre otros testimonios, con el impactante relato –que mantuvo en secreto por más de 30 años- del ya fallecido maderero de origen sueco Albert Ostman, quien en 1957, durante unas vacaciones solitarias en la región del Toba Inlet en la Columbia Británica, habría sido raptado por una familia de sasquatchs permaneciendo prisionero por ellos durante toda una semana. Los describió como gigantes peludos, de comportamiento primitivo, y de estatura superior a los dos metros.

Pero la prueba quizás más concluyente de la existencia del sasquatch la constituye una filmación de 6 m de película de 16 mm tomada el 20 de octubre de 1967 por Roger Patterson  en Bluff Creek, lugar situado en las Montañas Costeras de la California Septentrional. En ella se puede ver a una hembra humanoide peluda, que corre en retirada, desde unos 15 m de Patterson y su acompañante. La película se considera auténtica, puesto que en dicho lugar se pudieron encontrar las pisadas de la hembra.

CONCLUSIONES

Corroborando las características homínidas de este ser, el gran zoólogo e investigador belga Bernard Heuvelmans sugiere que podría tratarse de un pariente del hombre prehistórico,  superviviente del Pitecántropo, al que incluso bautizó como Dnipithecus Nivalis. (Fuente: El Yeti y otros abominables hombres. Colección Grandes Enigmas, en fascículos).

Si se trata efectivamente de descendientes del Hombre de Neanderthal, en el contexto de nuestra teoría se explica entonces la elevada estatura que se les atribuye, que correspondería con la del hombre antediluviano, ya que al vivir en un ambiente totalmente natural sin la contaminación, el stress y los malos hábitos de los asentamientos densamente poblados de los humanos “más inteligentes” que habitan las regiones más bajas y templadas, les ha sido posible conservar casi intacta la estatura original de sus antepasados. Su escasa población se debe seguramente a la implacable selección natural en aquellos ambientes hostiles, en la que sólo la descendencia de los más fuertes y mejor adaptados ha logrado permanecer hasta nuestros días.

Llegar a comprobar fehacientemente su existencia así como los análisis bioquímicos de rigor que demostrarían se estrecha relación genética con el homo sapiens sapiens plantearía, junto con una revisión profunda de la Antropología y de la Historia, serios cuestionamientos religiosos, morales, éticos y sociológicos ya que, al tratarse de seres humanos y no animales, deberían ser respetados sus derechos universales, incorporados a la jurisprudencia político-legal, social y económica de las regiones donde habitan, seguramente censados (si se puede), y debidamente protegidos junto con su hábitat.

Por supuesto que no faltarían quiénes desearían y tratarían, con mucho celo, de incorporarlos a la sociedad, “educarlos, evangelizarlos y civilizarlos” como ocurrió ya con los aborígenes americanos y de otras latitudes, o también utilizarlos para oscuros propósitos (milicias, mafias, explotación laboral, comercio sexual, espectáculos circenses, etc.).

Esperemos que esto último nunca llegue a ocurrir, que les dejemos vivir en paz hasta el día de la restauración de todas las cosas... y que no les hagamos más daño del que ya una vez les fuera hecho.

Por



ENLACES RECOMENDADOS 


VIDEOS RECOMENDADOS

1) Bigfoot. De la serie “Teorías de la Conspiración”:

2) The Definitive Guide To The Creature Know As Bigfoot. Documental sobre Bigfoot del History Channel:

3) Southern Sasquatch. Documental acerca del Sasquatch de la serie Lost Tapes:



______________________________________
OBSERVACIÓN: Esta serie de artículos están basados o forman parte del libro escrito recientemente por el autor, denominado “Fenómalos – La Quinta Esencia”, publicado por Editorial Trafford (ISBN 1-4251-1232-3, por Trafford Publishing, Canada). Las imágenes y videos han sido tomadas directamente de la web, y sólo para efectos de ilustración del texto. De haber alguna de ellos con derechos de autor agradeceré comunicármelo para retirarlas de esta entrada.
 Compártalo entre contactos y amigos


Consiga un ejemplar original del libro a través del sitio de Trafford Publishing, a través de Amazon.com, y también a través de Buscalibros.cl (Chile).
El lector podrá hacer llegar sus consultas y/o comentarios al correo electrónico del autor: fenomalos@gmail.com, como también hacerse seguidor nuestro en Twitter y miembro de la comunidad Facebook "Fenómalos La Quinta Esencia".


Si desea obtener una versión impresa de este artículo, bájelo desde:
Visite también nuestra página web:
http://fenomalos.wix.com/fenomalos 

7 comentarios:

Anónimo dijo...

El diario digital ElPais.com en noviembre de 2008 anunció que gracias a un estudio llevado a cabo por el Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva de Leipzig, se pudo evidenciar que los neandertales y los humanos modernos comparten el 99.5 por ciento de los genes, lo que refuerza lo afirmado en el artículo, en cuanto a que puede ser posible que la diferencia entre ambas "especies" no se haya debido a un proceso evolutivo sino que a una manipulación intencionada del genoma humano.

Anónimo dijo...

Todos los argumentos planteados coinciden con la existencia del hombre de neardenthal, aunque creo que faltan pruebas mas concretas para demostrarla, me refiero a entablar contacto con alguno de estos seres. Ojalá algún día las encuentren sin interferir en la integridad de estos seres humanos.
Que buena la información del comentario anterior.

Rortiz dijo...

Buen artículo, mientras más leo menos creo en la evolución de las especies.¿como no evolucionaron los monitos, monos chimpances, gorilas; aunque los ADN sean similares, cada ser tiene algo que a otro le falta. El más completo es el del Hombre.

Anónimo dijo...

Is Bigfoot Genuine or faux? For more than four hundred years, there have already been reporting’s of a guy like animal that may be completely coated in hair.
[url=http://www.is-bigfoot-real.com/]bigfoot videos[/url]

Anónimo dijo...

Is Bigfoot Actual or made up? For around 4 hundred many years, there have already been reporting’s of a man like monster that is definitely completely coated in hair.
[url=http://www.is-bigfoot-real.com/]sasquatch[/url]

Anónimo dijo...

Carlos, espero por tu nuevo artículo.

Anónimo dijo...

Mi vecino y yo hemos sido simplemente debatiendo este tema específico , es por lo general en busca de mostrarme incorrecta . Su opinión sobre este está muy bien y con precisión cómo realmente siento . Yo ahora le envió este sitio web para destacar lo de su punto de vista personal . Después de tratar sobre el sitio web e-libro me marcó y podría venir de nuevo para aprender sus nuevos mensajes !